(Me) Consumo

Ella era una chica normal, feliz. Pero cuando el azul de sus ojos apareció en su vida no pudo resistir, quien se iba a resistir a esa sonrisa. Su felicidad aumentaba por momentos. Todo salía bien, pero del revés.
Ahora el agujero es tan grande que no puede salir. Siempre camina sola, con la mirada perdida. Ya no sonríe, ni llora. Solo sigue. Esta ahí pero no vive. Para ella todo acabó cuando termino de leer la ultima palabra de esa carta que le destrozaría en cuestión de segundos. Y ahí están, solo queda eso.

Escombros, que un día fueron algo mas que una cara gris. Su única distracción es observar como el cigarro se consume, y como la botella se vacía y el vaso se llena. De penas.